lunes, 20 de febrero de 2012

Allá.

Sonríes y tus labios esbozan un sueño del que es difícil despertar.
Miras directamente a mis ojos, imperturbable, silenciosa y apasionadamente.
Nuestra respiración danza armoniosamente. Tu pulso se acelera, junto al mío. Bailamos.

Tus pupilas son hermosas en este momento, tu boca se limita a murmurar.
Mis oídos incendiándose ante los sonidos que emanas.
Mis manos no son frías más y junto a tu espalda van escribiendo una historia, sin puntos, sólo comas.

Viajamos y regresamos.

No hay comentarios: